Ir al contenido principal

Los imbéciles...parafraseando a León.

"Sos un imbécil que a los chicos culpás de la pobreza y la mugre que hay..." (León Gieco, "El Imbécil")

El viernes por la mañana, estaba preparándome para salir mientras veía el noticiero (no recuerdo cual, para el caso es lo mismo). Estaban mostrando las imágenes del violento desalojo de los cartoneros; agarré la última parte, era el último grupo de personas (y resalto lo de personas porque muchos se lo olvidan) que sacaban del terreno junto a las vías, obligándolo a cargar sus pocas pertenencias a un camión. Había una señora con un bebé y junto a ella un chico de unos ¿5, 6 años? mirando todo. Luego al niño lo subieron por unos instantes al acoplado y éste movía tímidamente la bandera argentina. La imágen lo decía todo; en ese breve y tímido gesto, tan simbólico, nos recordaba a muchos...y a todos los que estaban mirando, que existen (aún cuando se los erradica de la vista), que tienen sus derechos..., y ni hablar de un niño. Son argentinos también, son nuestros semejantes con necesidades y con derechos. Ese chico lo estaba diciendo "a gritos"...a pesar de estar callado.

¿Tanto cuesta escucharlos?, ¿tanto cuesta darle lo que necesitan?...piden un tren...y no precisamente el "bala". Y nuestra atención y ayuda no estarían de más.

http://www.clarin. com/shared/ v8.1/swf/ fullscreen_ video.html? archivo=http: //videosfla. uigc.net/ 2008/02/22/ cartonerostn. flv

Para leer la carta abierta (recomendable) escrita por Alejandro Tiscornia pinchar aquí

Mientras terminaba de escribir estas líneas llegó un mensaje al blog, ¿a ver?
"TBA, ¿Por qué no TBAS al carajo y ponés un tren?"

Ups...no es "pro" esa sugerencia.

Comentarios

Anónimo ha dicho que…
Como dije en el grupo Pasajeros del Roca mientras veia las imagenes de le desalojo de los cartoneros en Belgrano lo primero que me vino a la cabeza fue el recuerdo de cuando iba al colegio en Retiro y Cacciatore cargo a toda la villa en trenes y los mando al interior, destruyendo con topadoras las casillas.

No me extraña que este gobierno municipal de la ciudad de Buenos Aires se haya mandado esta, no estan mas que siendo consecuentes con su ideologia de darwinismo social.

Coincidentemente el papi del actual intendente en jefe hizo un gran negocio con la basura en esas epocas de las que hablaba al principio de mi mensajes.
Anónimo ha dicho que…
Los que votaron a Macri, ya tienen lo suyo. Están empezando a mostrar la hilacha estos fascistas, y esto es solo la punta de lanza. Seguro que se vienen cosas peores.

Entradas populares de este blog

(Burzaco) Rotonda "El Vapor": De nombres, palmeras y helicópteros.

¿ Sabía usted por qué le dicen "El Vapor"?. La licenciada Silvana Rodriguez (citada también en otras entradas anteriores ) nos trae la respuesta: El cruce de las actuales Avenidas Espora y Moteverde, conocido como “Rotonda El Vapor”, tiene una historia interesante. Este cruce es conocido desde principios del siglo XIX, ya que se trata de los caminos más antiguos que tenemos. En ese entonces una de las industrias más importantes eran las graserías, donde se manofacturaba parte del ganado que se carneaba en las estancias mucho más al sur; estas graserías eran conocidas como “vapores”, por las emanaciones de sus chimeneas. Así a principios de 1800 una grasería se instala en las inmediaciones de este cruce y con el tiempo se empezó a conocer como cruce del “vapor”, actualmente “Rotonda El Vapor”. A principios del siglo XX se confunde este nombre, la grasería ya no existía, con El Vapor de la Carrera, barco que cruzaba el Río de la Plata uniendo la ciudad de Buenos Aires con Colo

De golosinas y kioscos de nuestra infancia. Con nostalgia y un poco de humor (Parte I).

Si hay algo que uno recuerda con cierta añoranza son los kioscos de nuestra infancia. Aquellos lugares especiales donde uno entraba, y deseaba todo lo que en él había. Lógicamente del deseo al hecho había mucho trecho…Y eso estaba directamente relacionado a la posibilidad –generalmente económica- de compra de nuestros padres; algo que uno de niño no entendía, pero la vida te lo va enseñando a la fuerza… Por lo cual había golosinas que se convertían en deseos permanentes y hasta, a veces, incumplidos. ¿Quién no se ha sacado el gusto, ya de grande, de probar esa golosina de la que fuimos privados en nuestra infancia?, los motivos podían ser muchos, pero generalmente prevalecían dos: porque nos podían hacer mal o porque era cara. A veces la primera servía de excusa para no amargarnos con la segunda. Pero de adultos, al re-descubrir esa golosina en el kiosco, no podemos excusarnos y concretamos ese viejo anhelo. Pequeños placeres, que le llaman. Y si hay algo que podemos afirmar es que,

Mis vecinos están de fiesta...

Y cuando ellos festejan algo, sabemos muy bien lo que va a pasar. De hecho, está pasando en este preciso momento; en la casa contigua. Sus vecinos, o sea nosotros y, me arriesgaría a decir toda la manzana, estamos escuchando su música a todo volumen. Y para colmo de males… cumbia. Cumbia y gritos. Porque también acostumbran acompañar la “melodía” con gritos, gritos de alcohol, supongo. De cerveza o vino, da igual. Acaban de escucharse dos alaridos seguidos. Y los enganchados de cumbia que no paran ni un minuto…este ritmo tan pegadizo…porque te pega en el marote como un martillo. Digo, me pregunto, ¿ por qué no se quedará afónico mi vecino? Corrección, ¿por qué no se quedará afónico mi vecino y el que lo acompaña en su grito?, hacen un duo. Dos, a falta de uno. Pero esto recién empieza. Este coctel explosivo (para las cabezas de sus vecinos) de cumbia, gritos y vaya a saber que más durará toda la noche. Hasta las 8 am aproximadamente. Si, si….son de larga duración. Y al final vendrá la