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MINISTRO RIVADAVIA: "EL SUEÑO DE ROQUE" .

De esas historias que motivan.

No tengo dudas. Cuando uno decide encarar algo con decisión y perseverancia -un proyecto, una investigación, un escrito, etc- se activan mecanismos invisibles; pareciera ponerse en marcha una maquinaria sutil que algunos llaman destino. Y en esa "maquinaria" una de las piezas principales es la sincronicidad. Digo máquina, solo por decir, algunas personas hablan de energía y dicen que el Universo empieza a conspirar para que uno vaya tomando caminos, abriendo puertas, buscando allá y no acá...Todo, claro, de manera inconsciente; en ese momento uno comienza a dejarse llevar por el instinto. Al menos eso hago yo. Y a veces hay que darle tiempo al tiempo. Esa tarde me encontraba precisamente relevando la zona rural de Ministro Rivadavia, en el marco de una investigación sobre antiguos habitantes en la región. El sol iba en busca de la línea del horizonte empezando a dibujar así -como salido de la paleta de un/a artista- lo que sería una hermoso ocaso; que nunca son iguales y en el campo nunca te dejan indiferentes. Transitaba por la calle Rivera casi llegando a Lezica. Calles polvorientas. En esa zona uno está más cerca del límite con Florencio Varela que del centro urbano de Ministro. Para quién no conoce esta región, Ministro Rivadavia (la localidad más antigua, pero a la vez de las más olvidadas de Alte. Brown) es en su mayor parte zona semi-rural y rural. Un valioso Patrimonio natural poco conocido. De un tiempo a esta parte su población aumentó con continuos asentamientos en distintos sectores, pero principalmente cercanos a su pequeño y antiguo centro urbano. Asentamientos que se extendieron principalmente paralelos a las arterias que discurren de N a S (Av. República y Av Espora) siendo esta última la divisoria con otras localidades (Longchamps y Glew, en sus respectivos tramos). Son barriadas muy humildes. Hay también otros reducidos conjuntos de viviendas precarias en otras zonas de la localidad, pero más desperdigadas. A medida que uno transita "campo adentro", hacia el Este, SE la fisonomía va cambiando al menos hasta los límites con Varela. Las extensiones de campo van aumentando y las propiedades a la vista disminuyen. Casas y casitas aquí y allá separadas quizás por varias hectáreas. Bellas arboledas y vegetación. En ese sector SE de Rivadavia funcionan todavía varios hornos de ladrillos (actividad que tiempo atrás fue una de las principales), hay también quintas con animales de granja, algunos viveros y otras viviendas y algunas propiedades que se alquilan para actividades de esparcimiento y recreativas.

Les brindo esta somera descripción para que se den una idea de como es la región. Pero allá en Lezica y Rivera hay pocas casitas , separadas por varias extensiones de campo. El verde, el marrón y sus matices es el paisaje que más predomina. Este relevamiento comprende ir conociendo mejor y prestando mucha atención a toda propiedad para verificar si se tratan de construcciones antiguas. Transitaba por Rivera, decía, doblé en Lezica hacia el norte, en dirección a Juan B. Justo pero antes de llegar a Zeballos, habiendo hecho apenas unos metros desde Rivera, hacia mi izquierda pasé por el frente de una propiedad muy humilde, dónde un pequeño galpón de chapas se levantaba junto a un invernadero hecho con plástico. Arriba de la entrada de ese galpón -levantado con chapas de tamaños, colores y orígenes varios- alcance a leer "BIBLIOTECA POPULAR". Mi mente tardó unos segundos en procesar ese cartel, mientras seguía avanzando. Entonces frené unos 30 metros más allá, decidido a bajarme para consultar si ese cartel había coincidido de forma azarosa en la construcción del galpón, aunque resultaba curioso que estuviera justo sobre el pórtico. ¿Por qué la extrañeza?- se preguntara más de uno. Por la zona; porque era la única casa a 100 metros a la redonda y más también. No era barrio, es campo.

No hay una biblioteca popular o pública en el pequeño centro urbano de Ministro Rivadavia (otra muestra del "olvido") que, de hecho, es unos de los proyectos que pretendemos desarrollar con un grupo vecinal vinculado a su Historia y Patrimonio, y ciertamente me extrañaba (y a la vez me ilusionaba) que la hubiera ahí. Entonces me bajé; y no alcancé a golpear las manos que un muchacho del otro lado de la tranquera me estaba mirando y escuchando preguntar por el cartel de letras negras, pintadas a mano, que claramente decía 'Biblioteca Popular".
- Ah sí, mi papá está con eso- me dijo..-Ya se lo llamo-. Pensé que, si estaba con "eso", definitivamente ese cartel no había sido puesto ahí por azar. Y comencé a sentirme feliz. Unos segundos después un hombre muy sencillo, no muy mayor de barba corta canosa y con una gorra de lana de cuya parte inferior asomaba una colita de pelo largo negro -envidiable por mí a quién la calvicie me ha ganado hace tiempo la partida- asintió a mi pregunta de ¿Aquí funciona una biblioteca?. -Si.. o ese es mi sueño. Porque es algo muy humilde, pero en la medida que puedo voy reuniendo algunos libros.
No podía disimular mi felicidad. Era evidente. Se dibujaba en mi rostro. Es que sentíá alegría, emoción y orgullo por ese hombre. Por su deseo, por su búsqueda. Porque ese anhelo también era el mío.
-Pase- me dijo.
Y Roque me contó sobre su sueño. Formar una biblioteca para la gente de la zona. Para la niñez cuyos padres no tienen la posibilidad de comprar libros ni de trasladarse a otros lugares, incluso dentro de la propia localidad. Ofrecer a estos -niños y adultos- la oportunidad de acceder a la lectura. ¡Que razón tiene Roque!.
También lo sabemos, por eso buscamos, desde el grupo vecinal, acercar a la comunidad de la zona actividades literarias, musicales y distintas manifestaciones del arte, junto con la historia.
Roque me mostró su sueño en proceso. Y otro ya en funcionamiento que también es parte de su sustento económico: el vivero y quinta dónde cuida y enseña a quien se acerca -e incluso a chicos de escuelas- sobre la importancia del cultivo de alimentos. 'La tierra no solo es para pisarla sino para alimentarse y cuidarla"- dice.
Roque Presentado tiene 68 años. Nació en el pueblo de Santa Elena, a las costas del río Paraná. Departamento de La Paz, Entre Ríos. Cuando llegó a Buenos Aires vivió por Olmos, en las afueras de La Plata dónde trabajó y aprendió sobre quintales. Anduvo por otros lados hasta que hace aproximadamente 40 años llegó a Ministro Rivadavia. Formó su familia junto a su esposa y compañera con quién crió 7 hijos y hoy tiene 6 nietos.
A este sueño lo encaró solo, aunque claro, ayudado por su familia. En la soledad del lugar que tiempo atrás lo habrá sido más acentuada. Entre la labor cotidiana, la siembra, el cuidado de la tierra y la atención a su familia numerosa y desde hace años a sus nietos y nietas se propuso concretar su deseo de dejar algo a las nuevas generaciones para que no se olviden de sus orígenes, de su lugar y del amor y respeto a la tierra. "Luché por esta tierra, hoy la tengo, pero yo no la quiero mi; la quiero compartir con todos los que se pueda...".
Pienso las palabras de Roque. La tierra para él, además de sustento y alimento, es conocimiento, sabiduría. Y eso es lo que quiere compartir y transmitir. Ambos, tierra y libros, nos alimentan, de distinto modo cada uno, pero que son necesarios para vivir en libertad.
No quise quitarle mucho tiempo de esa tarde a Roque, le conté de nuestras actividades vecinales vinculadas a la historia de la región, lo invitamos a sumarse y ya lo siento parte. Y le prometí -es ya un compromiso- mi colaboración con donaciones de libros para concretar su sueño. Sueños que también compartimos. ¿Cuántos soñamos lo mismo?...la cuestión es encontrarnos. Y eso que mencionaba al principio, esa sutil "maquinaria", suele encargarse de unir nuestros caminos. En la vida dudo de muchas cosas; pero de una estoy seguro: la casualidad no existe.
Podemos darle una mano a Roque con donaciones de libros y otros elementos (estantes, muebles, sillas, mesa, etc). Para coordinar me puede escribir a juanpgomez2004@gmail.com y les informaré dónde pueden ubicar a Roque. En esta época de emergencia sanitaria no podemos fomentar visitas al lugar
Juan Pablo Gómez.
Integrante de Vecin@s por la Protección del Patrimonio Histórico y Arquitectónico de M. Rivadavia. (Buscanos en fb)
Desde MINISTRO RIVADAVIA.
PUEBLO HISTÓRICO, RURAL Y NATURAL
de Alte. Brown.










Podes ver el video dónde Roque cuenta el porqué de su sueño





VECINOS preocupados por el Patrimonio.
 
  El grupo "Vecinos por la Protección del Patrimonio de Ministro Rivadavia (Pueblo Histórico de Alte. Brown)"  busca la conservación y el rescate de la historia genuina del orígen del Pueblo de Rivadavia, de manera documentada, pero también busca fomentar desde la Historia. 
  ¿Cómo?. Visibilizando el patrimonio arquitectónico que todavia queda en el pequeño casco histórico de Ministro Rivadavia, bregando para su protección. Concientizando sobre lo importante de la preservación de lo Patrimonial.  
  Generando y organizando actividades gratuitas vinculadas a lo histórico-patrimonial-cultural en las que convergen distintas disciplinas del arte: pintura, literatura, música, canto, charlas históricas y muestras fotográficas. 
  Tienen en carpeta varios proyectos que buscan desarrollar. 
Entre ellos, el iniciado este año, que trata de un pormenorizado relevamiento del área rural para descubrir e investigar distintos aspectos históricos, y conocer -¿por qué,no?- las bellezas que ésta región natural conserva. 
  A muchos nos preocupa la crítica situación que hoy atraviesa la cuestión patrimonial de este bello e histórico rincón de Alte. Brown.  Y estamos convencidos que se hace imperioso una definitiva contundente Declaratoria Patrimonial para Ministro Rivadavia como  "Pueblo Histórico, Rural y Natural" del Partido de Alte. Brown, y se trabaje con estas tres premisas como ejes. 
  Y así, -y de una por todas- deje cargar con el mote de "pueblo olvidado" para convertirse en un rincón pujante que pueda desarrollar, entre otras cosas, un turismo-responsable vinculado a los tres aspectos antes mencionados  ("Ministro Rivadavia. Pueblo Histórico, rural y Natural"). Pero debe ser ahora, antes de que sea demasiado tarde. Necesitamos de muchas voluntades para tratar de llevar a buen puerto estos proyectos. 
  Hoy conforman el equipo de trabajo e investigación: la Sra. Nora Cao, Sr. Fernando Font y el Sr. Juan Pablo Gómez.      
   



Comentarios

Unknown ha dicho que…
Tengo enciclopedias, son 12 tomos, como lo hago llegar. No tengo movilidad.

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